Hoy 1º de noviembre de 2008, inicio esta página. Aunque algunos amigos ya comentaron antes. Me encontraron porque colaboro en un blog amigo como "Rolito", un Rolito para gente más adulta en "Las fiestass del castillo"
En la cabecera de página, las imágenes, no son más que la expresión de mi deseo. El video musical también es una forma de expresión de mi deseo, el que estoy segura de que ustedes comparten.

lunes, 9 de marzo de 2009

Otro ejemplo de entorno familiar

En el primer caso citado en mi entrada anterior, parece que el remedio llegó pero tardó; en el segundo, la solución fue inmediata. En ambos casos, la resolución del problema dependió de los familiares del niño. En el caso que veremos a continuación, no hubo ayuda efectiva de la familia del niño, aunque ella creyera que estaba haciendo lo correcto para su educación.

Éste es un caso de padres desplazados, padres que no tienen autoridad para ejercer su rol. Padres que delegan su potestad aunque posean el derecho.

3º caso: Un bebé llega a una familia constituida por ambos padres y una niña de diez años. La niña es inteligente y autoritaria. Ambos padres, semianalfabetos, mayores de treinta años, están deslumbrados por la inteligencia de la pequeña, que progresa de maravilla en su escolaridad, y son manipulados por ella. Ambos trabajan y dejan al cuidado de la niña al bebé, varias horas al día, Su madre se jacta de la picardía de su hija que debe ocuparse de él, mientras ella trabaja, porque intenta dormirlo cerrándole los ojitos con sus dedos, para poder ir a jugar. La madre no repara en que su hija comienza a sentir fastidio por la tarea que le encomendaron, y en consecuencia, por su hermanito.

Siempre que puede, la pequeña fastidia al bebé, pero con tanta picardía que los padres creen que se preocupa por él. Es tanta la responsabilidad que cargan sobre su hija, que ésta aprovecha cualquier ocasión para menospreciar a ese hermano que le quitó su trono de princesita y los mimos de sus padres, causándole, a cambio molestias en su natural necesidad lúdica.

Ambos hermanos crecen. El varoncito ingresa a la educación primaria, su hermana ya está en la media. Ella es la que lo sabe todo, la que revisa las tareas escolares, la que pone cincuenta cuentas como penitencia cuando su hermano comete “barbaridades” de cualquier niño de su edad.

Cada vez que el niño tropieza con alguna dificultad, hay más cálculos como penitencia y menos permisos para jugar con los amigos o ir a la piscina. Y sus padres están encantados por lo bien que se ocupa “la madre sustituta” (su hermana) del hijo de ellos. La niña se convierte, así, en un prodigio; y el niño en un torpe que no sabe nada y es un inútil para cualquier cosa, hasta que llega a escuchar de sus padres que hubiese sido mejor criar a un chancho en vez de criarlo a él..

Por supuesto que el niño resulta ser un fracaso como estudiante, no porque nació incapaz sino porque es lo que metieron en su cabeza. Él está convencido de que no es capaz de aprender nada y jamás sale del primer año de la educación media, pese al triple intento. Pese al llanto de su madre porque su hijo es menos que cualquiera de sus primos y la vergüenza de su hermana, que está muy preocupada por la opinión de sus amistades sobre su hermano, opinión que ella misma promovió.

Ya adulto, intenta finalizar sus estudios pero no puede desprenderse del mote de inútil y fracasado, y vuelve a fracasar. No, en realidad no fracasa, fracasa quien intenta algo, y él no intenta aprobar ninguna asignatura. En realidad no hace nada por superarse, porque está seguro de que no lo logrará.

A sus dieciséis años, su hermana decide que si no estudia debe trabajar y le busca un empleo, al que se hace la rabona varias veces, como cualquier estudiante, y lo pierde. Entonces su hermana le busca otro y otro, y otro…

…Y pasó el resto de su vida de empleo en empleo, conseguidos por su hermana.

Tuvo las posibilidades económicas como para llegar a ser un profesional, y también tuvo el empeño de su familia para que así fuera, pero su misma familia lo impidió.

¡Qué paradoja! Cuando nuestros hijos nacen, proyectamos fabulosos futuros para ellos, y muchas veces, nosotros mismos los malogramos.


"POR UNA INFANCIA FELIZ, PARA UN MUNDO MEJOR"


ELIZABETH




No hay comentarios: